Una Sonrisa Pusiste En Mi Rostro
Una sonrisa
pusiste en mi rostro.
Porque
príncipe me has llamado.
Por eso
ante ti me postro.
Gracias,
Señor por cuanto me has amado.
Mi boca
tiene grabada una sonrisa
Desde que
me llamaste hijo.
Reconfortante
es, como lo es la brisa.
Feliz estoy
desde que tu boca me bendijo.
Gracias
Padre por ser más que mi amigo.
Gracias por
ser mi Padre Eterno.
Gracias por
ser mi consuelo y mi abrigo.
Gracias por
tu amor dulce y tierno.
Mi corazón
de alegría rebosa
Porque Tú
me llamaste heredero.
Desde
entonces mi alma goza
Porque tu
amor es amor verdadero.
No comments:
Post a Comment